Alexander
McCall Smith
El día ideal de Alexander McCall Smith, en un mundo sin distancias.
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Me despertaría en el Belmond Eagle Island Lodge, en el delta del Okavango, en Botsuana, y escribiría en el porche, viendo como los elefantes se acercaban a beber.
Después desayunaría: un huevo cocido, una tostada, mermelada e higos.
Estaría con Elizabeth y nuestras hijas Emily de 28 y Lucy, de 30 y su hijo Douglas, que casi tiene un año. Contemplaríamos la naturaleza.
Luego me iría a Toronto a comprarme un montón de libros.
Para comer, Florencia, pasta y de sobremesa visita a los Uficci
La cena, con los amigos, sería en nuestra casa de Argyll junto al loch. Coceríamos mejillones cogidos en la orilla y las caballas que habría pescado servidas con hinojo marino, recogido en la marea baja.
Nos tomaríamos una o dos botellas de Brunello di Montalcino, mientras el sol se hundía tras el Ben Hiant (la montaña sagrada) en el horizonte.
Y lanzaría unos cuantos fuegos artificiales antes de irme a la cama
BIOGRAFIA
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Nació en 1948, en Rhodesia, donde su padre trabajaba como fiscal del gobierno de lo que entonces era una colonia inglesa. Pasó la infancia y adolescencia en Africa, y a los 17 años fue a estudiar a Escocia. Se doctoró en derecho por la universidad de Edimburgo.
En 1980 volvió a Africa como profesor de derecho a la Universidad de Botsuana, donde participó en la redacción del que sería el código penal y ayudó a fundar el colegio de Leyes.
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Regresó a Edimburgo como catedrático de derecho forense. A lo largo de los años escribió un significativo número de artículos y libros sobre la ley en relación con la ética de la medicina. Representó a Gran Bretaña en la comisión bioética de la U.N.E.S.C.O .
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A pesar de haber publicado algunos cuentos, su carrera como escritor no comienza hasta finales de los 90, cuando publica "The No. 1 Ladies' Detective Agency " (1998).
En 2004, tras el éxito y el reconocimiento público, dejó su trabajo en la universidad y en la Unesco, para entregarse de lleno a la literatura.